jueves, 20 de diciembre de 2012

¿Quiénes son los desconocidos?


Vivimos rodeados de gente.  Por la calle nos cruzamos con tantas personas. Cada una con sus pensamientos, con sus inquietudes, con sus problemas...con su vida. Personas a las que no conocemos y que no tenemos necesidad ni intención de conocer.
También estamos rodeados de parientes y amigos. Personas a las que conocemos.
¿O también son desconocidos?
¿Quién puede afirmar que conoce realmente a alguien?
Convivimos con ellos y creemos conocerlos. No nos damos cuenta de que no es así hasta que no hacen algo que nos sorprende por ser algo que no es propio de la persona que creíamos conocer.
El que dijo que cada persona es un mundo no se equivocaba. Porque, al igual que pasa con el mundo, por muy cerca que estemos nunca llegaremos a conocerlo del todo. Siempre habrán cosas que se nos escapen. Aspectos de su personalidad que no creíamos que pudiéramos llegar a ver. Secretos escondidos que jamás imaginábamos que esa persona pudiera tener. Acciones que jamás creíamos que pudiera llevar a cabo.
Miramos a los que nos rodean y lo único que vemos es una coraza, una máscara que oculta la verdad sobre esa persona, una verdad que puede no gustarnos, que puede que no averigüemos nunca.
Hay otra cosa que hace imposible que lleguemos a conocer a una es que cambiamos. Con el tiempo, dependiendo de nuestras compañías o dependiendo de la situación en la que nos encontremos no somos los mismos. Una persona totalmente distinta puede aparecer en determinadas situaciones y esconderse en la vida diaria.
La última cosa, y la más importante, que hace que no podamos conocer del todo a las personas es que ni siquiera nos conocemos a nosotros mismos.